Fuego

"Hace unos años éramos unos desconocidos, pero teníamos bastante claro que vivíamos en un romance furtivo. Nuestros besos sigilosos en la cocina, las manos entrelazadas en los bares y esa pasión, que sabíamos ya en aquel entonces, no era pasajera.

Todo sucedió deprisa, casi sin darnos cuenta:

Un día estábamos en el baño -aún tengo este recuerdo intacto, perfecto- tú estabas fuera de la ducha y yo dentro. A través de un beso, de repente una chispa iluminó el espacio, en el que permanecíamos a oscuras. La electricidad recorrió primero mi cuerpo desde la punta de los dedos de mis pies, mis piernas, mi abdomen, mi pecho y salió casi despedida hacia tu boca, donde al besarnos, tuvo lugar aquella explosión, aquel incendio.

Se hizo el silencio, aunque en ese instante lo entendimos todo. El fuego hizo todo lo demás".